CASOS PRÁTICOS DE SOCIEDADES



Uso de sociedades y fideicomisos
Los siguientes casos prácticos proporcionan información valiosa sobre cómo se pueden utilizar las sociedades offshore, las sociedades territoriales y los fideicomisos offshore para estructurar sus asuntos con el fin de maximizar sus activos.

Sociedad de cartera intermediaria de grupo
ATB Limited, sociedad constituida y gestionada en Sudáfrica que se dedica a los servicios de telecomunicaciones, va a invertir en China. Sus operaciones chinas consistirán tanto en la fabricación como en la prestación de servicios. ATB tiene previsto introducirse en el mercado chino de telecomunicaciones y de acuerdo con un estudio de mercado realizado con anterioridad, las operaciones serán muy rentables en un par de años.


Cómo estructurar la inversión de ATB de forma eficaz desde el punto de vista fiscal?

Solución sugerida:
Los dividendos pagados por la filial china a la empresa madre sudafricano no dará lugar a retención en la fuente china si el inversor sudafricano califica como una "empresa de inversión extranjera" bajo la ley china. Este es el caso, entre otros, si la empresa china es totalmente de propiedad extranjera. Tras la recepción de los dividendos por parte de la empresa madre en Sudáfrica, impuestos adicionales sobre sociedades en Sudáfrica pueden ser debidos.

La canalización de los dividendos a una sociedad holding del grupo, y posteriormente a los inversores de Sudáfrica, de tal manera que el impuesto debido en Sudáfrica por impuestos sobre los dividendos recibidos, podría ser una solución interesante.

Esto podría lograrse mediante la estructuración de la inversión a través de una sociedad holding del grupo registrada en las Seychelles como una CSL (empresa licencia especial) en conformidad con la Ley de Seychelles. Los dividendos recibidos por esta empresa sólo están sujetas al impuesto del 1,5% en las Seychelles.

Debido a la disposición especial en el tratado entre las islas Seychelles y Sudáfrica, ningún outro impuesto se paga en Sudáfrica sobre la redistribución de los dividendos a la empresa madre, si los hubiere. Por lo tanto, la carga impositiva máxima se limita al 1,5%.

Si se prefiere, los dividendos recibidos en las Seychelles pueden, por supuesto, también acumularse en las Seychelles


Sociedad intermediaria financiera

Un inversor israelí está invirtiendo en la República Checa. Se financiará una parte considerable de la inversión con deuda. Puesto que la retención fiscal checa sobre los intereses pagados a Israel es del 10%, el inversor se pregunta si se puede evitar este impuesto mediante la estructuración del préstamo a través de un tercer país. Los inversores israelíes desean evitar pagar este impuesto por motivos internos.

Solución sugerida:
Los intereses pagados por el deudor en la República Checa a Israel está sujeto a un impuesto de retención 10% de interés (tal como la reducción en el tratado fiscal entre los dos países). Los intereses recibidos en Israel están sujetas al impuesto sobre la renta del 36%.

Un préstamo back-to-back a través de una empresa intermediaria de Luxemburgo podría ser una solución fiscal efectiva. El convenio de doble imposición entre la República Checa y Luxemburgo prevé una tasa de retención 0%. En Luxemburgo, se puede obtener un acuerdo de las autoridades fiscales, reduciendo así al mínimo la exposición al impuesto luxemburgués. De acuerdo con la legislación nacional luxemburguesa, no hay impuesto de retención sobre los intereses pagados en el extranjero.

Por lo tanto, el interés se puede pagar a cualquier país (incluidos los centros financieros offshore) sin atraer más impuestos.


Sociedad de concesión de licencias

Braminter Ltd., sociedad constituida en Taiwán, ha desarrollado un nuevo artilugio que se utiliza como pieza de recambio en el montaje de helicópteros. Al usar este artilugio en la fabricación de helicópteros, se pueden reducir considerablemente los costes de operación de los mismos.

Braminter es titular de la patente a nivel mundial de este invento y se pregunta cómo se puede organizar la explotación de la patente de forma eficaz desde el punto de vista fiscal.

Solución sugerida:
La patente debería ser transferida a una empresa en un país de baja fiscalidad, en los que las patentes tienen licencia para una o más empresas de concesión de licencias en los países con una red de tratados fiscales densa y que no impomga un impuesto de retención sobre las licencias pagadas al extranjero.

El registro de una empresa en Maurício podría cumplir con estos objetivos. Maurício tiene una creciente red de tratados de doble tributación, lo que reduce sustancialmente las retenciones a cuenta sobre las regalías pagadas a la empresa Maurício.
Aunque la compañía de Maurício está sujeta a impuesto en Maurício a un ritmo del 15%, el diferencial entre las regalías recibidas y las regalías pagadas al titular de la patente en offshore se puede minimizar (Maurício no ha aún adoptado todas las normas de precios de transferencia que podrían tener un impacto en la cantidad de “spread” a pagar).
Las licencias pagadas por la compañía de Maurício no están sujetas a un impuesto de retención en la Isla Maurício.

Nota: Si no existe un tratado de doble imposición entre Maurício y el país desde el que se pagan las licencias (“royalties”), el registro de una empresa en un tercer país puede considerarse, por ejemplo, Luxemburgo, sería una solución adecuada, pues Luxemburgo tiene un buen acuerdo fiscal con Maurício.


Sociedad de servicio personal
Edward Bjorn trabaja actualmente en Luxemburgo como asesor informático independiente a través de una sociedad de gestión luxemburguesa. Por consiguiente, en la actualidad paga impuestos a Luxemburgo (tipos de hasta un 38%).

El Sr. Jose va a celebrar un nuevo contrato de prestación de servicios para trabajar en Italia para una sociedad estadounidense que cuenta con una oficina europea en el Reino Unido. Se trata de una contrata y dicha sociedad disfruta de los servicios de Edward subcontratándolo a uno de sus clientes en Italia.

El Sr. Jose se pregunta si puede reducir el riesgo de pagar el impuesto sobre la renta en Italia (tipos de hasta un 45%), por ejemplo, utilizando una sociedad offshore directa o indirectamente controlada por él.

Solución sugerida:
El señor Smith podría constituir una nueva empresa de servicios de personal en un país que tuviera un buen tratado tributario con Italia, asegurando así - con un poco de estructuración adecuada - que los honorarios pagados por el trabajo de Smith en Italia se pagaran en el país de residencia de la empresa de servicios.

La empresa permite a Albert que trabaje desde Italia.

La empresa de servicios de personal es propiedad de una empresa de servicios de carácter personal creada por Albert en una jurisdicción extranjera. Por lo tanto, es necesario que la empresa de servicios esté establecida en un país que no aplique una retención en origen sobre los dividendos pagados en el extranjero.

Un país que reúne estas condiciones es Malta. Aunque las tasas sobre los rendimiento generados en Itália por la empresa maltesa están sujetas al impuesto a una tasa del 35%, dos tercios del impuesto maltés será reembolsado al momento de la distribución de los dividendos para fuera, lo que reduce la carga fiscal en Malta a 11,67% . Malta no cobra impuesto de retención sobre los dividendos.


Sociedades mercantiles internacionales

Yuri Perchenko vive en Rusia y se dedica a la compra-venta de calzado. Compra calzado de Italia y lo vende en grandes almacenes en Francia, Alemania y España. El Sr. Kirilenko se pregunta si puede estructurar su empresa de forma eficaz desde el punto de vista fiscal, por ejemplo, utilizando una sociedad offshore.

Solución sugerida:
Sr. Kirilenko puede registrar una sociedad comercial en un país de baja tributación, lo que garantiza que sus beneficios de explotación no serán tributados en Rusia (su país de residencia), ni en Francia, Alemania o España (ya que las autoridades fiscales argumentan que no tiene una presencia fiscal en estos países).

Como toda la operación en cuestión son transacciones con la Unión Europea, el Sr. Kirilenko debe obtener un registro de IVA. Una buena jurisdicción para obtener el registro de IVA es la Isla de Man.

Por lo tanto, si la empresa de Isla de Man desea enviar los zapatos de Italia a España, ella solamente tendrá que informar a la empresa italiana de su número de IVA, por lo que la empresa italiana en su factura de venta cargará el IVA a 0%.

La empresa italiana no tiene que cargar el IVA a la sociedad de Isla de Man. La empresa de Isla de Man de esto modo tendría entonces que obtener el número de IVA de la empresa española y posteriormente emitir una factura con IVA e igual modo cargada a 0% para la empresa española.

Para la constitución de la sociedad en la Isla de Man, hay un par de posibilidades: una LLC (tributada como una entidad fiscalmente transparente, por lo que efectivamente se quedaría totalmente exenta de impuesto en la Isla de Man sobre los beneficios obtenidos) o una sociedad residente.

Una LLC distribuye una parte de las ganancias a sua miembros, sin lugar a impuesto de retención sobre el mismo. La sociedad en la Isla de Man empresa no está obligada a retener el impuesto sobre los dividendos cuando sus propietarios no son residentes en la Isla de Man.


Sociedades Mercantiles Internacionales (Escenario 2)

Wolfgang Schmidt es un individuo con elevado poder adquisitivo y de inversión que vive en Mónaco. Quiere traer productos autóctonos del Lejano Oriente para vendérselos a uno de sus socios empresariales en Brasil y quiere hacerlo de forma eficiente desde el punto de vista fiscal.

Solución sugerida:
Sr. Paul Smith puede registrar en el Reino Unido una sociedad tipo LLP (Limited Liability Partnership) por el que él y su esposa son los miembros. La LLP puede entonces comprar los productos desde el Lejano Oriente y venderlos al comprador brasileño.

El pago de la transacción sería recibido en una cuenta bancaria en el Reino Unido pues que en el Reino Unido la LLP es tratada fiscalmente como una asociación. Los beneficios derivados del comercio (s) se puede atribuir a los Miembros, que se los someterían a tributación en Mónaco.


Sociedades de propiedad inmobiliaria
Francis Holme, ciudadano húngaro con elevado poder adquisitivo y de inversión que vive en Budapest, invierte cantidades considerables de su riqueza personal en propiedad inmobiliaria, tanto en Hungría como en otros países de Europa central y del Este.

El Sr. Pedro se pregunta cómo se puede organizar el rendimiento de su inversión de forma eficaz desde el punto de vista fiscal. La misma cuestión se le plantea en el caso de decidir vender sus propiedades en estos países y de obtener ganancias por dicha venta.

Solución sugerida:
Suponiendo que el señor Holme no está dedicado al desarrollo de actividad inmobiliaria, la origen de sus ingresos es renta de alquiler o, en el caso de una venta, ganancia de capital. En muchos países, esto se considera "ingresos pasivos" a efectos fiscales.

La adquisición de los bienes inmuebles en los países en cuestión se puede hacer a través de empresas locales controladas directa o indirectamente por el señor Holme. Estas sociedades locales pueden ser de propiedad exclusiva de una sociedad holding en un país con un régimen holding favorable.

Los dividendos distribuidos por las empresas en los países en que los bienes inmuebles se sitúan deben:

No estar sujeta a retención fiscal sobre los dividendos (o sólo a una tasa baja);
No estar sujeta al Impuesto sobre Sociedades, a cuando de la recepción de os fondos por la sociedad Holding;
No estar sujeto a una retención fiscal sobre los dividendos pagados por la sociedad Holding;

Por otra parte, si la sociedad holding vende las acciones de las empresas que detienen los bienes inmobiliarios (la propiedad), las plusvalías derivados de ellas no deben estar sujetas al impuesto de sociedades.

Un país que reúne las condiciones anteriores para el régimen de sociedad Holding es Luxemburgo. Una empresa de Chipre sostiene la sociedad luxemburguesa y, directa o indirectamente, la propiedad del señor Holme sería una solución fiscal correcta.


Sociedad de cartera

Pedro Ramirez, ciudadano mexicano con elevado poder adquisitivo y de inversión, planea invertir en nuevas instalaciones recreativas y turísticas (complejos termales, campos de golf, casas de turismo rural, restaurantes, etc.) en Portugal.

Al Sr. Gimenez le interesa estructurar su inversión de modo que los activos que sean total o parcialmente de su propiedad en Portugal estén bien protegidos contra diversos riesgos empresariales, económicos o políticos; y el rendimiento de su inversión después del comienzo de las operaciones comerciales sea eficaz desde el punto de vista fiscal.

Solución sugerida:
Sr. Gimenez podría dividir las operaciones comerciales y las inmobiliarias, constituyendo sociedades separadas para las distintas operaciones comerciales y inmobiliarias. Las empresas inmobiliarias entonces procederían al alquiler de la propiedad a compañías operativas.

La renta de alquileres estará sujeta al impuesto de sociedades en Portugal a una tasa del 28%, independientemente de si la empresa inmobiliaria es residente en Portugal o no. Impuestos adicionales se pagarían si las sociedades que detienen la propiedad, los bienes inmuebles, están registradas en países offshore (paraísos fiscales).

Durante la fase de desarrollo, las empresas operativas han acumulado pérdidas. Si las empresas que detienen los inmuebles son residentes en Portugal, tanto las empresas inmobiliarias como las empresas operativas pueden tener su capital detenido por una sociedad Holding portuguesa.

De esta manera, todo el grupo puede reclamar la consolidación fiscal, en conformidad con la ley portuguesa, como resultado de lo cual las ganancias de las empresas inmobiliarias pueden ser compensadas con las pérdidas iniciales de las compañías operativas, reduciendo así al mínimo su exposición fiscal a la hacienda portuguesa.

Si la sociedad Holding portuguesa es propiedad de una sociedad Holding extranjera en tales condiciones que los dividendos

No están sujetas a una retención fiscal sobre los dividendos;
No están sujetas al Impuesto sobre Sociedades a la recepción por parte de la sociedad holding (o están calificándose para un crédito por los impuestos subyacentes portugueses)
No están sujetas a una retención fiscal sobre los dividendos pagados por la sociedad Holding;

Entonces estaremos delante de una solución eficaz en términos de planificación fiscal.

La eficacia es aún mayor si la holding internacional es propiedad de una Sociedad de Negocios Internacionales (IBC) o una empresa exenta de impuestos en una jurisdicción extranjera.

Se cumplirían esas condiciones, si la empresa portuguesa es propiedad de una sociedad Holding en el Reino Unido, esta última propiedad de una empresa registrada en las Islas Vírgenes Británicas, como se ilustra en el siguiente diagrama.

Nota: Una sociedad Holding, por ejemplo, registrada en Chipre, podría no funcionar mientras Chipre se encuentra en el listado negro bajo la ley portuguesa.


CASOS PRÁCTICOS DE FIDEICOMISOS

Ingresos procedentes del extranjero
Mary Ruddy, ciudadana canadiense, ha adquirido varios apartamentos de lujo en la costa mediterránea francesa. Su intención es alquilar los apartamentos a terceros. En caso de que se vendan los apartamentos o cuando Nancy fallezca, se deben evitar los impuestos sobre las plusvalías y los impuestos sobre la herencia en la medida de lo posible.

Asimismo, Mary se pregunta cómo se pueden evitar o reducir en la medida de lo posible los elevados impuestos sobre los ingresos por arrendamiento y/o los impuestos sobre las plusvalías en caso de que se vendan los apartamentos.

Solución sugerida:
No es posible evitar la fiscalidad francesa sobre cualquier ingreso derivado de alquiler de los apartamentos, ya que los apartamentos están situados en Francia. Si María es propietaria de los apartamentos como un individuo, la carga tributaria puede ser tan alta como 49,58%.

Sin embargo, si los apartamentos son de propiedad de una empresa controlada directa o indirectamente por ella, el impuesto sobre sociedades francés será cargado a una tasa efectiva de 34 1/3%, independientemente de que los apartamentos sean propiedad de un nacional o una empresa extranjera.

Si la empresa propietaria del inmueble está registrada en Luxemburgo, el impuesto de capital en Francia, puede ser evitado debido a una disposición especial en el tratado fiscal entre Francia y Luxemburgo.

Impuestos en Francia sobre herencias, en caso de la muerte de María, pueden, bajo ciertas condiciones, ser evitados, si la propiedad de los apartamentos están directa o indirectamente detenida por un fideicomiso. Esto necesitaría una estructuración muy cuidada y, en todo caso, el fideicomiso debería ser discrecional y irrevocable. Por otra parte, ninguno de los beneficiarios podría ser residente de Francia.

Los dividendos pagados por la sociedad luxemburguesa a un fideicomiso no se calificarían para alivio fiscal, lo que resultaría en la retención fiscal del 25%. Todavía, y con el fin de evitar dicha retención, la empresa de Luxemburgo debería ser propiedad de una empresa offshore (o por una sociedad luxemburguesa Holding 1929), que de vez en cuando liquidaría la empresa ordinaria de Luxemburgo.

Las ganancias de liquidación no están sujetas a retenciones fiscales en Luxemburgo. La empresa offshore (o la empresa de Luxemburgo 1929) puede distribuir los beneficios de liquidación recibidas en forma de dividendos al trust, dondequiera que se encuentren (sujeto a las normas contra la evasión canadienses).



Planificación patrimonial

Bernard Shaw, viudo de 65 años de edad, planea volver a contraer matrimonio con una canadiense y emigrar a Canadá. El Sr. Brian reside en el Reino Unido en la actualidad y tiene dos hijos; el hijo vive en las Bahamas y la hija, que se casó con un alemán, reside en Alemania desde hace más de 10 años. Su futura esposa también tiene dos hijos de su primer matrimonio, un hijo que vive en Brasil y una hija que vive en Estados Unidos.

Antes de volver a casarse, el Sr. Brian desea llegar a un acuerdo integral y eficaz desde el punto de vista fiscal para la administración y la cesión de su patrimonio, en su caso, y de los beneficios derivados del mismo a su muerte.

Solución sugerida:
Este es un caso "clásico" de la utilización de fideicomisos para la planificación del patrimonio, pero en cuanto a las implicaciones fiscales (impuesto sobre la renta, impuesto de sucesiones, el impuesto sobre las ganancias de capital), necesitaría una estructuración cuidadosa. Puntos de atención:

• ¿Está el señor Shaw domiciliado a efectos fiscales del Reino Unido?
• ¿El Sr. Brian mantiene algún interés en el fideicomiso, ya sea como administrador o como beneficiario? Si es así, ¿tendría esto alguna consecuencia fiscal en el Reino Unido para el Sr. Brian?
• ¿Cuáles son las consecuencias fiscales de la hija del Sr. Brian, residente de Alemania, como beneficiario?
• ¿Los pagos al fideicomiso estarán sujetas al impuesto sobre la renta o el impuesto de retención en jurisdicciones extranjeras? Si es así, puede esto ser resuelto a traves del registro de sociedades holding intermedias?
• Se establecería el fideicomiso en conformidad con la ley del Reino Unido o de derecho extranjero? Si en conformidad con la legislación del Reino Unido, sería un fideicomiso residente o un fideicomiso offshore?
• ¿Habría alguna transferencia de activos a efectos fiscales del Reino Unido, despues del registro del fideicomiso?
• ¿Qué medidas contra la evasión fiscal en el Reino Unido se debria tener en cuenta?

Las respuestas a todas estas y otras cuestiones pueden ser múltiples. Por lo tanto, no es posible dar una solución clara a este caso. En cualquier caso, es recomendable que el fideicomiso se constituya después que el Sr. Brian haya salido del Reino Unido y que el fideicomiso no se constituya en conformidad con el Derecho del Reino Unido o de la legislación canadiense.


Desinversión de activos personales

Roe Moet percibe importes considerables de regalías (y dividendos) de la sociedad rusa para la que trabaja, que están sujetas a gravamen en la Federación de Rusia. Se pregunta si puede explotar las patentes de una manera más eficaz desde el punto de vista fiscal depositándolas en bancos offshore.

Al mismo tiempo, tiene la intención de utilizar las ganancias para los dos fondos con fines benéficos y para la educación de sus nietos (en la actualidad, Olga tiene solo una hija de 12 años de edad).

Solución sugerida:
Este es un típico ejemplo de la utilización de un fideicomiso para la desinversión de los activos personales. Si este fideicomiso se constituye, la primera cuestión que debe examinarse es: ¿habrá consecuencias fiscales en Rusia (en particular del impuesto sobre donaciones) con respecto a la transferencia de las acciones y de la patente para un fideicomiso extranjero?

Como no existe aun una obligación tributaria en Rusia al respecto de ingresos a título de donaciones, sin embargo, los activos pueden ser transferidos al exterior a un fideicomiso offshore creado en un país de baja fiscalidad.

La explotación de las patentes y de la participación en la sociedad rusa, probablemente tendrá que ser estructurado a través de sociedades holding intermedias separadas.


Planificación del impuesto sobre la herencia

Jean Rolis, ciudadano francés residente en Francia, es propietario de valiosas obras de arte expuestas en varias galerías y museos del Reino Unido. Si Jean muriese en un futuro próximo, el valor de dichas obras de arte sobrepasaría sin duda el umbral del impuesto sobre la herencia a efectos de dicho impuesto en el Reino Unido.

El Sr. Charles se pregunta cómo puede evitar el riesgo de pagar el impuesto sobre la herencia del Reino Unido.

Solución sugerida:
Si Pierre moriría mientras que poseer estas obras de arte en el Reino Unido, entonces el impuesto sobre herencias en el Reino Unido, sin duda se aplicarían. Una forma de evitar esto es crear un fideicomiso offshore, por ejemplo, en la Isla de Man o cualquier otra jurisdicción, como Belice o mismo Nueva Zelanda.

Los fideicomisarios pueden crear una sociedad offshore para tomar posesión de las obras de arte.

Si se establece una estructura de dos niveles, a continuación, las obras de arte en cuestión se pueden transferir para el fideicomiso y disfrutar en el Reino Unido sin ninguna exposición fiscal, una vez que la propiedad fiduciaria estará formada por las acciones de la empresa offshore.

Para efectos fiscales en el Reino Unido, estas acciones son bienes exentos, ya que están situadas fuera del Reino Unido.

 

 

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